domingo, 25 de octubre de 2009

¡VIVA LAS VEGAS!



Hace unos días fui al casino que hay en Torrelodones, Madrid, y me encontré con un ambiente cargado de dinero, estadísticas, números, ganancias y pérdidas.
Cambié 10 euros en cuatro fichas de 2,5 euros cada una y me dirigí hacia las mesas de la ruleta americana. Allí me encontré con una gran cantidad de personas que realizaban grandes apuestas con muchas posibilidades de perder, y novatos del mundillo como yo que se asomaban tímidamente, buscando un lugar en el que depositar sus fichas.


La mayoría de personas que había allí rondarían los treinta y cinco y cuarenta y cinco años y aunque había casos en los que las personas perdían miles de euros por tirada sin cambiar el aspecto impertérrito de sus rostros, algunos mostraban disgusto al perder sus fichas.
Al ver el lugar repleto me pregunté cómo era posible que tanta gente arriesgara sus capitales en plena crisis.

Rebuscando en Internet, hallé la respuesta. Los jóvenes encuentran más dificultades para encontrar un empleo, lo que genera paro, y debido a ese paro, tienen más tiempo libre.
La conclusión a la que llegan mucho es a la de intentar conseguir unos ingresos, arriesgando su capital en tiempo de ocio de una manera arriesgada, pero también sencilla, a través del juego y las apuestas.
Muchos pierden todo lo que tienen y se convierten en adictos, y otros con suerte aumentan sus ganancias. El jugador con cabeza gana y se retira a tiempo, al contrario que aquel que ante unas grandes ganancias, continua apostando. Es necesario saber que el que apuesta a la larga siempre pierde, reduciendo las probabilidades de éxito a 0.

Pero, ¿qué es lo que hace un casino? ¿Un casino produce dinero? En realidad, vende una imagen de diversión, una forma de pasar el rato y, con suerte, aumentar nuestro dinero. ¿A los ricachones? En absoluto, cualquiera puede entrar y probar fortuna. ¿Cómo lo hacen? Ofreciendo unas instalaciones y juegos que atraigan a las personas.
Aunque existe un pequeño precio para entrar al casino (3 euros en mi caso), no existe límite en cuanto a lo que apostar en diversión, por lo que el equilibrio es perfecto. A todo el mundo le parece bien que entrar cueste únicamente 3 euros y que le dejen plena libertad en cuanto al resto del consumo de diversión.

El éxito que están teniendo los casinos se debe a la gran labor de marketing, publicidad e incluso turismo que realizan los propios casinos. Invirtiendo en esos aspectos, atraen nuevos clientes potenciales, y consiguen que jueguen en sus mesas y se dejen el dinero en ellas, todo sea por la diversión y el placer.
Esta emprendedora acción nos hace darnos cuenta de que si algo funciona bien y da dinero, se puede mejorar para dar aún más dinero.

Como he aprendido de las lecciones impartidas en clase, siempre se debe invertir en modificar la infraestructura si con ello nos aseguramos unas mayores ganancias en el futuro.
Es curioso observar que la frontera de posibilidades de producción es muy variable en este negocio, ya que depende del número de clientes y de la suerte que tengan apostando.

Creo que todos sabemos que cuando vas a un casino, salgas con el dinero que salgas, el que habrá ganado es el casino. La banca siempre gana, y el que no entienda eso y crea que al casino se va para aumentar su fortuna se llevará una gran decepción.

Por cierto, logré convertir mis 10 euros en 30, y además de propina una gran noche de diversión, porque para eso fui, y eso fue lo que me llevé.
20 euros para un estudiante que no trabaja es una gran suma de dinero que espero saber administrar para mi futuro placer.


domingo, 18 de octubre de 2009

“Cuando ya no quede sitio, los economistas dominarán la Tierra”

Pues sí queridos seguidores. Temblad de terror porque os quedan años hasta que la economía se haga con el control del sector tecnológico. ¿Cómo? ¿Por qué? ¿Dónde esconderse? ¿Tengo que sacar el rifle del armario? A continuación lo explicamos.

El 19 de abril de 1965 un ingeniero llamado Gordon Moore afirmó en el artículo de una revista una teoría que, aunque en principio para él no fue más que unas palabras más en todo su trabajo, resultaría ser una de las Leyes más conocidas en el terreno de la tecnología, la Ley de Moore.
Dicha ley, aseguraba el número de transistores por pulgada en circuitos integrados se duplicaba cada año y que la tendencia continuaría durante las siguientes dos décadas.

Una década más tarde, en 1975, realiza una modificación, en la que afirma que el crecimiento seguiría siendo exponencial, aunque el ritmo bajaría a la mitad, ya que la capacidad de integración de transistores por pulgada se duplicaría cada 2 años.
La Ley de Moore sigue cumpliéndose hasta la fecha, lo que explica que los precios sigan bajando mientras que las características de los equipos aumenten. Por ejemplo: los ordenadores que salen al mercado reducen su precio a la mitad al año siguiente y quedan obsoletos rápidamente, en un período de dos años.
No obstante, el propio Moore ha afirmado que esta ley no funcionará eternamente, y que en un tiempo de 10 o 15 años, una nueva tecnología podrá sustituir a la actual.
Los estudios predicen que a partir del 2014 los costes para la fabricación de herramientas para semiconductores, ascenderán hasta llegar a ser tan elevados para que se siga cumpliendo la Ley.

¿Y por qué debería importarnos la Ley de Moore si esto es un blog de economía?
Muy sencillo.

En otros artículos sobre la materia se ha barajado que existe un límite de miniaturización para la fabricación de esos transistores. Cuando alcancen un límite, los electrones se escaparían de los canales, causando errores en el sistema.
El motivo de la caída de la Ley de Moore no es físico, sino económico.
Una vez haya dejado de funcionar, la tecnología quedará en un segundo plano, mientras que la economía dominará el sector, dado que los fabricantes cambiarán su sistema de negocio para conseguir más beneficios, conservando la tecnología existente durante más tiempo.

¿Qué quiere decir todo esto? Pues básicamente, que la economía tendrá una mayor importancia en un futuro, extendido sus influencias hacia todos los sectores conocidos.

Y para que no se diga que este blog no tiene “chicha”, añadimos un vídeo del susodicho Moore, explicando estas ideas (eso sí, en inglés, que para esos somos cultos):

domingo, 11 de octubre de 2009

¡Mario Bros gana un nuevo round a la piratería!


En 20Minutos.es lo tienen claro: "El año pasado los españoles fueron menos al cine, adquirieron menos DVD y menos discos. Sin embargo, compraron casi tantos videojuegos como en 2007".
Un hurra por la industria videojueguil. A diferencia de otros sectores de la industria audiovisual, parece ser que los videojuegos siguen arrasando, saltando por encima, cual Mario Bros, del monstruo de la crisis. Nada parece frenar las compras de estos productos, cada vez más de moda entre la población joven, y ya no tan joven. La tan temida piratería, no parece tener tantos efectos negativos sobre este mercado.
En 2008, las ventas de este sector fueron de 1.432 millones de euros, y prevee un descenso mínimo en las compras, debido principalmente a la piratería y la crisis.
Es necesario recordar que el sector de los videojuegos acumula más beneficios que las películas y la música. Además, con las modificaciones del sector, provinientes en mayor parte de NINTENDO, han ampliado su mercado, consiguiendo que una buena parte de la demanda provenga de personas de edad avanzada.
España se consolida en el sector como el cuarto mercado europeo y el sexto mundial pero, no obstante, es uno de los países con mayor índice de piratería, habiéndole hecho perder 180 millones de euros en el último año, por lo que el sector volverá a embarcarse en la lucha por su erradicación en los próximos tiempos.
Es importante tener en cuenta que la piratería, aparte de ser un medio de obtener un sustitutivo del producto original, es ilegal, no garantiza calidad alguna y deteriora el sector de los videojuegos, perjudicando futuras creaciones e inversiones en nuevos productos.
Así que ya sabéis, la piratería es la responsable de esos molestos diálogos en inglés en algunos juegos, y de que esas ediciones especiales no salgan de Japón. No me seais garrulos y comprad juegos, ya sean de segunda mano o reducidos de precio.
¡LARGA VIDA A LOS VIDEOJUEGOS!

domingo, 4 de octubre de 2009


El FMI (Fondo Monetario Internacional) parece intuir que a nuestro país le queda todavía un largo camino de obstáculos en el ámbito económico.
Para hacer este trayecto algo más llevadero, el FMI solicita al Gobierno que disminuya el déficit presupuestario (también conocido como déficit fiscal, y que ocurre cuando una entidad gasta más dinero del que gana), recortar el gasto (tratando de que en el proceso no se vean afectados los beneficios), reformar el mercado laboral (lo que aumentaría la contratación a tiempo parial) y mejorar la competividad (¡ahí es nada!).
España es el país europeo que necesita más urgentemente una reestructuración económica y se prevé que será el único país europeo con una recesión hacia 2010.
El Gobierno español, sin embargo, arroja la idea de que el FMI esté cometiendo un fallo de cálculo, y que probablemente el Fondo hubiera malentendido ciertos aspectos de la economía española.
La recuperación económica española pretende recuperarse a mediados de 2010.Por su parte el FMI ataca el mal funcionamiento del mercado laboral del país, señalando mayoritariamente los ajustes de despidos como única solución efectuada, destruyendo puestos de empleo pero no bajando salarios. “El objetivo de la reforma debería ajustarse a la creación de empleo y la reducción de presiones al desempleo en las cuentas del Estado” comentó el subdirector del departamento para Europa del FMI.